El Mercado Negro del Jabón
1999
Memoria
Ficha de obra
N° de registro: NG-O-031
Fecha de creación: 1999
Año Exhibición: 1999
Fecha de exposición: Mayo a junio
Nombre de la exposición: La Bastille
Lugar de la exposición: Museo de Arte Contemporáneo, Parque Forestal
Institución Organizadora: DIRAC y MAC
Ciudad: Santiago
Pais: Chile
Tipo de exposición: Colectiva
Tipo de Obra: Instalación
N° de componentes: 22
Técnica - Material: Siete barras de 17 kg de jabón sobre mesón de madera, fotografías y documentos enmarcados (10), baúl de mimbre y bolso de cuero, bolsa de tela con objetos en su interior y texto a punto cruz dibujado al muro
Dimensiones: Dimensiones variables
Propietario: Colección Il Posto. Carlos Solari y Paula del Sol
Estado de Conservación: Bueno
Descripción Visual
Instalación compuesta por una secuencia de documentos enmarcados, entre ellos fotografías en blanco y negro, certificados y textos escritos a máquina. A continuación del último cuadro, una tela blanca, de pequeñas dimensiones, cuelga desde el muro. Sobre los marcos se lee la frase “el mercado negro del jabón”, escrita sobre el muro simulando el bordado en punto cruz. Bajo los cuadros se dispone una mesa de dos niveles, de madera oscura y con manchas de pintura en su superficie. Sobre la cubierta hay siete barras de jabón de gran formato. Al costado derecho de la mesa, justo bajo el último cuadro y la tela, descansa sobre el suelo un baúl de mimbre, puesto de lado, y sobre la superficie de unos de sus costados yace un bolso de cuero color café.
Texto Artista
“En el año 1940, mi madre Teresa Andreu, su hermano Delfín y mi abuela Josefa Berenguer cruzaron clandestinamente la frontera de España con Francia, por el paso fronterizo de Port Bou; llegaron a vivir con mi abuelo –quien había cruzado un año antes– a Toulouse, Francia.
Walter Benjamin cruzó ilegalmente la misma frontera de Francia con España, por el paso de Port Bou, y murió suicidado en ese pequeño pueblo de España.
Dos cruces de frontera, en sentido contrario uno del otro, dos destinos diferentes, uno desgraciado y otro fatal.
Ese pequeño acontecimiento de pasaje hacia la vida, el otro coincidente hacia la muerte, hace que yo nazca en Santiago de Chile en el año 1960.
La maleta con el último manuscrito de Walter Benjamin se habría perdido en ese suceso fatal de septiembre de 1940. Mi madre y Walter Benjamin, probablemente se cruzaron, ese septiembre de 1940, en las escaleras del Hotel Francia de Port Bou.
Benjamin murió — en el intento de pasar hacia acá, y mi familia hacia allá, fabricó clandestinamente jabón en el techo de la casa de refugiados de Toulouse.
En 1999, esos acontecimientos, me permiten a mí, realizar una obra a partir de los restos cenicientos de esa historia. El mercado negro del jabón. (…) En esta obra, al igual que en La Tela de mi Abuela (1996), Correspondencias de Mayo (2001), Sic Transit (2006) y Ficción de un Origen (2006) — son obras que interpelan ciertos relatos, sean históricos o de ficción, que acreditan una tradición autobiográfica de desarraigo, tragedias mayores como la guerra y el exilio y de lo que podría denominar “inestabilidad histórica”.
He intentado hacer de ello, con el imaginario que supone, un correlato con los procedimientos artísticos, sobre todo con las materialidades de los soportes y con el uso traslativo de prácticas, generalmente femeninas, provenientes del ámbito doméstico. Mis referencias provienen de la búsqueda, del rescate y fijación forzosa de relatos orales apenas audibles, de manualidades hogareñas perdidas, de historias tan heroicas como privadas que fraguaron el momento de la imaginación y cuya naturaleza es ser olvidadas, de algunos documentos de archivo, de frases famosas buscadas que me indiquen un sentido verosímil de la dimensión personal. Mis trabajos pretenden establecer cruces temáticos, procedimentales y técnicos entre las prácticas que determinan el espacio femenino y particularizado de lo privado y aquéllos discursos y prácticas que se determinan como paradigma del espacio político e histórico de lo público. Pretendo resolver ese tránsito de sentidos a través de insuflar el prestigio del arte a los oficios domésticos y a las prácticas recolectoras y clasificatorias reservadas a la mujer por el uso y las costumbres de la economía doméstica, privilegiando de entre esos tópicos “la instancia del tejido y del bordado” y sus metáforas materiales y escriturales.
Las fotografías, documentos y objetos atesorados por mi abuelo Modesto Andreu y desplazados por fronteras hasta llegar casualmente a Chile, me permiten entretejer una memoria y reconstruir o construir una historia posible y la posibilidad de tener una historia.
Nury González, Exilio y escritura, sin fecha.
“El Mercado Negro del Jabón es una obra construida a partir de historias de exilios y documentos arrastrados por muchas fronteras: el éxodo de mis abuelos de España a Francia en 1939, y el del filósofo judío-alemán Walter Benjamin, de Francia a España en 1940. Dos cruces de frontera por el mismo punto, Port Bou, en sentido contrario uno del otro; dos destinos diferentes, uno desgraciado y otro fatal. Mis abuelos, y mi madre, sobrevivieron fabricando clandestinamente jabón en el techo de la casa de refugiados de Toulouse. Benjamin se suicidó en ese pueblo de España. Ese pequeño acontecimiento de pasaje hacia la vida —el otro, coincidente, hacia la muerte— hizo que yo naciera en Santiago de Chile en 1960 y que, años más tarde, estudiara licenciatura en Arte. Mi infancia transcurrió en medio de relatos heroicos de la Guerra Civil Española y de la segunda guerra mundial. La economía doméstica transmitida por mi abuela, siempre fue para mí la práctica de una economía de guerra, ejercicios disciplinados de parche, de zurcido, de bordado, de remendado. Esos acontecimientos me permitieron, en 1999, realizar una obra a partir de los restos cenicientos de esa historia.”
Nury González en catálogo Una imagen llamada palabra, 2016, p.65
“Son todas obras que interpelan ciertos relatos, sean históricos o de ficción, que acreditan una tradición autobiográfica de desarraigo, tragedias mayores como la guerra y el exilio y de lo que podría denominar “inestabilidad histórica”. He intentado hacer de ello, con el imaginario que supone, un correlato con los procedimientos artísticos, sobre todo con las materialidades de los soportes y con el uso traslativo de prácticas, generalmente femeninas, provenientes del ámbito doméstico. Mis referencias provienen de la búsqueda, del rescate y fijación forzosa de relatos orales apenas audibles, de manualidades hogareñas perdidas, de historias tan heroicas como privadas que fraguaron el momento de la imaginación y cuya naturaleza es ser olvidadas, de algunos documentos de archivo, de frases famosas buscadas que me indiquen un sentido verosímil de la dimensión personal. Mi trabajo pretenden establecer cruces temáticos, procedimentales y técnicos entre las prácticas que determinan el espacio femenino y particularizado de lo privado y aquéllos discursos y prácticas que se determinan como paradigma del espacio político e histórico de lo público. Ese tránsito de sentidos a través de insuflar el prestigio del arte a los oficios domésticos y a las prácticas recolectoras y clasificatorias reservadas a la mujer por el uso y las costumbres de la economía doméstica, privilegiando de entre esos tópicos “la instancia del tejido y del bordado” y sus metáforas materiales y escriturales”.
Nury González, ponencia Matucana 100, sin fecha.
Contexto histórico-político
Esta obra surge como respuesta a la venida a Chile de los artistas franceses que habían formado parte del proyecto Chile-Francia, organizado por la DIRAC en 1998. “La relación Chile Francia me hizo sentido en ese minuto de poder trabajar con esa historia de que mi abuela fabricaba clandestinamente jabón” (NG Entrevista 20/10/2022) Momento de colapso de un origen. En 1991 muere su abuelo y hereda sus documentos, entonces se da la oportunidad de trabajar con ellos, que eran muy completos y detallados. En esta obra pudo trabajar con la historia de su familia en Toulouse: “La biografía de uno es una estructura para construir una obra”.
Nury recuerda que cuando esta obra giró por latinoamérica, muchas personas se reconocían en ella. “Siempre el publico se ve reflejado en las historias de migración”. La itinerancia, titulada El lugar sin límite, se presentó en México, Costa Rica, Perú, Paraguay y Uruguay, entre los años 1999 y 2000.
En el año 2006 El Mercado Negro del Jabón fue exhibido en la Bienal de Pontevedra, España, cuyo título fue OFF/ FORA: Movimientos Imaginarios entre Galicia y el Cono Sur. Posteriormente la obra fue parte de la exposición Efemérides de 2013, en el Museo Histórico Nacional, y en la exposición Una imagen llamada palabra, la cual inauguró el Centro de Arte Contemporáneo de Cerrillos en 2016.
Biografia de la obra
“La biografía de una es una estructura, un detonante para crear o construir una obra. Esta obra recorrió muchos lugares y las personas se reconocían en esta historia. (…) Entre las historias de cruce de fronteras, se cuenta que hay que llevar cosidas las joyas en la ropa, en la obra está como una bolsita en la pared. En esta primera versión no se bordó el texto a la pared, solo se hizo el traspaso de papel calco. Las cartas se toman como soporte y las letras como signos gráficos”. Los textos escritos a máquina que están en papel café pegado sobre otros papeles son textos de su autoría. También hay una definición de Jabón. Usa la mesa del taller de pintura de Gonzalo Díaz, por eso tiene manchas de pintura. Utilizó jabones de una fábrica de jabón, ubicada en Rodrigo de Araya con Vicuña Mackenna. “Es jabón para los mecánicos”. La abuela llega antes, el abuelo catalan puede arrancar en el 39. En Francia llegan a un campo de concentración, que era una playa cercada. En la obra muestra los telegramas donde le avisan que tiene un viaje en barco. Se viene a Chile porque había alguien que le propone un futuro económico. Su madre no quería venirse, ella había llegado caminando a Francia. No se nacionalizó como chilena y entre otras cosas las metió a la Alianza Francesa para que estuvieran preparadas para cuando se fueran para allá. Entre el 85 y 90 ella empieza a ir periódicamente a Toulouse y España. En uno de esos viajes su madre decide comprar un nicho en Mequinenza, las cenizas de su abuelo las llevo ella con su abuela, las de su abuela, las llevó su papá.
Fuentes Bibliograficas
El sueño de una noche de verano. Museo del Barro, Asunción, Paraguay. Proyecto Exilios y Memoria, Ministerio de Relaciones Exteriores de Chile, 2015.